Cómo y cuándo podar los setos

Cómo y cuándo podar los setos

Seguramente tu jardín posea alguna barrera natural de vegetación, bien con fines delimitadores, bien con otros más estéticos u ornamentales. Para conseguir unos setos bien recortados y uniformes se requiere un mantenimiento periódico que impida el crecimiento incontrolado de las ramas de estos árboles o arbustos.

Con la llegada de la primavera, y para mantener la forma de nuestros setos lo más pulcra posible, es necesario que realicemos una primera poda entre los meses de abril y mayo (la otra la realizaremos en el mes de septiembre, al terminar el verano). Aun así, el número de podas dependerá del clima (pueden ser necesarias hasta 4 al año). Esta primera poda de primavera se realiza una vez que los primeros brotes hayan madurado, ya que, de este modo, frenaremos el crecimiento rápido y descontrolado y conseguiremos que la planta siga creciendo con más vigor, sobre todo si deseamos darle una forma concreta.

A continuación te explicaremos los tipos de setos y te indicaremos cómo y cuándo realizar la poda.
 

Tipos de setos

Una vez que nos enfrentamos al proceso de poda de nuestros setos, tenemos dos tipologías diferentes que determinarán la forma y aspecto de nuestro seto y, por ende, el diseño de nuestro jardín.

Seto informal

Si decidimos dejar crecer nuestras plantas de forma libre, igualmente deberemos realizar podas periódicas para controlar su crecimiento y adaptarlas al jardín, conservando siempre su aspecto natural. Este tipo de setos necesitan menos mantenimiento y son preferibles para jardines de tamaños mayores. Lo que haremos será eliminar las ramas secas, muertas o aquellas que sobresalen demasiado.
Algunos de los setos más comunes que se dejan crecer de forma libre son aquellos que florecen, como los rosales, camelias o adelfas.

Seto formal

Los setos formales son aquellos setos que podamos para otorgarles una determinada forma. Es decir, delimitamos su crecimiento de una forma concreta. Debido a esto, necesitan una poda periódica y regular.

Para realizar esta labor, es aconsejable ayudarse de hilos o cuerdas niveladas previamente que nos guíen en la poda para obtener el mejor resultado y no lamentar después habernos pasado de corte.
En el caso de arbustos como las coníferas, debemos procurar siempre que la base sea más ancha que la parte superior para que el sol pueda llegar a todas las ramas. Iremos cortando las ramas laterales desde la base sin tocar la copa hasta que esta haya alcanzado la altura esperada. Cuando esto ocurra, las podas que se realicen al año serán de mantenimiento destinadas a mantener su forma y altura.
Entre estos, algunos de los más comunes son los cipreses y los tejos.
 

Tipos de poda

En función del tipo y estado del seto que debamos podar, nos decantaremos por una técnica de poda u otra:

Poda de mantenimiento

El objetivo de este tipo de poda es mantener la forma del seto y su frondosidad. Esta poda se realiza una vez que han madurado los nuevos brotes, recortándolos en línea recta unos 10-15 cm. Con una o dos podas de mantenimiento al año suele ser suficiente.

Poda de renovación

Según el estado del seto podremos optar por una poda más intensa, cortando alrededor de tres cuartas partes de los extremos de los brotes con el objetivo de favorecer la aparición de ramas fuertes, o una poda menos intensa, cortando dos tercios de los brotes con frutos para que los brotes que dejemos crezcan más fuertes. Es aconsejable practicarla una única vez al año (invierno).

Poda radical

Cuando tenemos en nuestro jardín setos con algunos años, puede se presenten zonas sin hojas, lo que les hace perder en cierta medida su encanto original. En la poda radical realizaremos un corte hasta el nivel del tronco más grueso, lo que provocará el crecimiento de nuevas ramificaciones de forma más densa. Debe realizarse en invierno.

Tipos de tijeras y cortasetos Anova

Anova dispone de una amplia gama de maquinaria y herramientas para el mantenimiento de sus setos. Podrá utilizar las tijeras de poda para las ramas más gruesas o los cortasetos manuales para aquellas ramas más delgadas (principalmente poda de mantenimiento). Asimismo, Anova dispone de una gama de tijeras de poda de batería y cortasetos que facilitarán en gran medida su trabajo.

No olvide nunca mantener los elementos de corte perfectamente afilados y usar los equipos de protección necesarios. Por último, no descuide la higiene de sus máquinas y utensilios de corte para evitar la transmisión de enfermedades de unas plantas a otras